Era empate, pero apareció BresbaIncreíble pero real. Otra vez el inefable Sebastián Bresba centro de atención. Como en la última temporada un error garrafal suyo posibilitó el triunfo de Luján, con un Marcos Fernández al que cargaron ilícitamente (hubo que darle varios puntos de sutura) sin que el árbitro se diera por enterado. Esta vez, en tiempo adicional, tiro libre de Vera, saltó Monllor a descolgar y clara infracción de Cerrato al arquero dentro del área chica no sancionada. La jugada sigue y Kees desde ángulo cerrado con perfecta tijera marcó el único gol.
Antes se vio un partido por momentos entretenido y un único equipo que quiso ganar, y ese fue Liniers. Sin la claridad ni las ideas necesarias para concretarlo, pero con ganas y actitud. A través de la figura del partido, que fue Palmerola, generó las únicas situaciones de gol (pocas en definitiva) que tuvo el partido. El Porvenir se llevó el triunfo casi sin tirar al arco. A través de una pelota detenida tuvo su única chance en el complemento.
El mérito de la visita fue agruparse bien del medio hacia atrás y aprovechar su oportunidad. En el primer tiempo insinuó algún acercamiento a través de Lucas López, pero nada más. Abusó del juego brusco al amparo de un árbitro que midió con distinta vara a ambos equipos. El empate le venía a medida a sus intenciones, a pesar de animarse algo más sobre el final del partido.
Liniers no repitió lo bueno que generó frente a Dock Sud. Pero aquí hay que detenerse en algunas circunstancias a analizar, al margen que individualmente muchos jugadores no estuvieron en su nivel. No se entendió bien la aparición de Daniel Casais sobre el lateral izquierdo, ya que como era de esperar nunca encontró su perfil. En el complemento, cuando se hacía necesario como primer cambio el ingreso de Cuevas, un jugador que le provee dinámica al equipo, se optó por otras alternativas y el ex Colegiales ingresó faltando apenas 4 minutos; en su primer aparición casi marca el tanto de apertura. Tampoco quedan demasiado claros los motivos de la salida de Matías Sawicki del primer equipo, cuando venía cumpliendo destacadas actuaciones. Sabemos que el técnico busca nuevas alternativas, y en esa idea podríamos llegar a justificar tantos cambios.
En definitiva, a pesar de no alcanzar el nivel esperado, Liniers de ninguna manera se debió ir con las manos vacías. Generó poco, pero más que su rival.
Cuando todo pintaba para el empate, apareció Bresba y una vez más hizo de las suyas.
Víctor Marinelli
FUENTE: http://www.liniersenascenso.com.ar/
