DESDE EL BANCO SE FACTURÓ LA LEVANTADA BLANQUINEGRA

El Porvenir logró darlo vuelta tras un primer tiempo plagado de errores y nerviosismo. Basterrechea y Castro, piezas claves para la remontada. ¿Los goles? Castro y Ferreyra.

En la mañana nublada de Gerli, El Porvenir recibió a su par de Español y, tras un comienzo dubitativo, el elenco de Ventura – Enrique aprobó un examen de carisma y entrega. El gol tempranero, merecido por cierto, de Romero desvaneció la planificación inicial de cuerpo técnico local y, a partir de allí, las dudas invadieron al plantel blanquinegro.

Momento clave. El defensor Arrúa Miranda arremetió, codo de por medio, ante el delantero Maximiliano Benítez y el árbitro le mostró la cartulina roja. En ese instante llegó el primer envión anímico de los dirigidos por Ventura y Enrique, que tan sólo fue un indicio de lo que sucedería en el complemento.

Claro, antes de comenzar el ST Enrique y Ventura apostaron de lleno a los ingresos de Arguello y Castro. ¿La idea? Aumentar el volumen de juego, acosar ofensivamente al rival y modificar la mentalidad de un equipo que, en el PT, se mostraba abatido y sin respuestas.

Otro factor determinante el match fue el ingreso del “Vasco” Baterrechea. El volante se adueñó del mediocampo y distribuyó el balón con criterio y orden. La igualdad transitoria llegó tras un desborde de Mauro Del Corro que concluyó Matías Castro y le permitió erradicar, aunque sea por un instante, la tensión que reinaba en el Gildo Ghersinich.

Luego, llegó el segundo. Párrafo aparte para el “Tanque” Benítez, la figura de la cancha, que pivoteó, aguantó y asistió a Ferreyra para que defina ante la salida de Cabral. 2 a 1 y, más allá de haber podido aumentar el marcador, logró aguantar el resultado con mucha entrega y vergüenza deportiva.

MATIAS GONZALEZ