De entrada, a los cinco minutos, la visita ya tenía en su haber dos llegadas muy claras a través de pelotas paradas, primero Gonzalo Leizza la tiró por arriba y después, Alejandro Morales se encontró con la humanidad de Manuel Peralta Salinas que salió al choque y atoró el remate del volante, que finalmente Germán Jiménez pudo despejar.
El juvenil defensor fue bastante efectivo en esta primera mitad, desactivando todos los intentos de ataque del “Lobo Rojo”, que llevó bastante peligro al área a través de centros que siempre encontraban en posición de peligro a sus delanteros.
El Porvenir no encontraba la forma de avanzar en el campo rival, el exceso de pelotazos y las esporádicas apariciones de Leandro Argüello no eran armas suficientes para lastimar al rival.
Pero cerca del final, llegó la jugada que abrió el partido, Carlos Bello no pudo controlar un centro enviado desde un tiro de esquina sobre la derecha, la pelota quedó picando en el borde del área chica y el capitán Facundo De Seta, con un zurdazo de media vuelta, logró marcar su primer gol oficial con la casaca blanquinegra a lo largo de 120 encuentros.
Sin embargo, sobre la hora, la visita tuvo otra llegada importante con la que casi logra el empate, un centro desde la derecha encontró solo a Damián Giménez Ledesma, pero su cabezazo pasó muy cerca del palo izquierdo del arco defendido por el guaraní.
Ariel Roldán, el impresentable árbitro de turno, señaló el cierre de los primeros cuarenta y cinco minutos y la tranquilidad que transitaba por Gerli se iba a ver abruptamente interrumpida ni bien empezara el complemento.
A los cinco minutos, Leonardo Espinoza envió un centro al área, buscando la presencia del goleador Lionel Fonzalida, quien al parecer logró peinar la pelota y enviarla al fondo de la red tras la tibia salida de Peralta Salinas.
Al “Porve” esto no le cayó bien y fue con todo en busca del segundo gol, aquí empezó a entrar en acción Damián “El Sapito” Valdez, quien soltándose en ofensiva logró llevar bastante peligro al arco de Bello. Justamente el “1” le ahogó el grito al volante, tapándole un mano a mano tras una gran jugada colectiva.
Después llegaría la gran polémica del día, Diego Ferreyra Campeñi remató al arco y se vio quizás una de las mejores atajadas de la copa, pero por parte de un defensor. No sólo era penal, sino también expulsión, pero Roldán evidentemente estaba en otra cosa.
El dueño de casa iba con todo y al final tuvo su merecido premio: Gustavo Fernández avanzó por la izquierda y tiró un centro que Matías Moreno Méndez no pudo conectar pero, afortunadamente para todos, el colombiano Francisco Palma Pérez estaba donde tenía que estar y, tan sólo con un simple toque, la justicia se hizo presente en el marcador.
Hay aires renovados por Blanco Encalada al 400 y se nota. Hoy se comenzó a transitar un nuevo camino y los conductores de esta ilusión tienen un apellido que es sinónimo de El Porvenir, obviamente no hace falta aclarar cuál es…
Alan Armada
