SE CIERRAN PUERTAS

Esta mañana comenzó a circular una imagen captura de las gastadas de tres personas de pasado inmediato en El Porvenir, burlándose de la derrota del equipo de Gabriel Ramón a manos de Sportivo Barracas y la consecuente pérdida de cualquier posibilidad de ascenso de categoría.
Quienes se despacharon a gusto contra los de Gerli fueron Nahuel Blanco, Guido Crespo y Sebastián Bagando.


Todo comenzó con el triunfo del "Porve" como visitante frente a Atlético Lugano por 4 a 0 en este torneo, en el cual de regreso a Blanco Encalada 400, los futbolistas se autoretrataron mostrando el "cuatro" con los dedos de la mano, lo que provocó el enojo de sus colegas del "Naranja".

Lo cierto es que éste era un ritual que practicaban los jugadores al finalizar cada partido, a modo "cábala", en el que expresaban su alegría ante cada una de las victorias que fueron hilvanando en este torneo. No había intención de burla hacia ningún equipo, según los protagonistas.



Tanto Blanco como Crespo realizaron las inferiores en El Porvenir y les tocó debutar el mismo día de la mano de Sergio Benet, en la derrota como local ante Luján por 1 a 0 en la Temporada 2010/2011. Pero hoy en día se encuentran alternando titularidad y suplencia en Atlético Lugano, por lo que se descargaron ante el fracaso de un equipo que los goleó acá y allá.

Por su parte, Bagando no se quedó atrás y, a pesar de haber trabajado el club hasta hace poco más de un mes, también se sumó a las gastadas. Fue preparador físico de Carlos Enrique en 2012 y también lo hizo en Futsal, durante el interinato de Sergio Geldstein en la institución. Hoy en día se encuentra realizando la misma labor en Cláypole, que el último sábado le puso suplentes a Leandro N. Alem, en el encuentro que el Lechero venció y superó al Porve en la tabla.

¿Chicanas cruzadas entre futbolistas de dos equipos? ¿Nostalgia por ya no pertenecer? Fuese el motivo que fuese, los hinchas se sienten dolidos y enfurecidos. En el seno del club también hubo repercusión por este uso de las redes sociales y no cayó para nada bien.