LA MISMA HISTORIA

El Porvenir perdió como local 1 a 0 ante Midland en un partido fundamental por el tema del descenso, con un arbitraje que dejó muchísimas dudas y en el que El Porve sufrió lo que le viene sucediendo en los últimos partidos: merece ganar, no concreta y termina con las manos vacías.

El primer tiempo fue un calco de los partidos ante el CADU y Cambaceres. El Porvenir manejando mejor la pelota hasta tres cuartos de cancha, dominando el campo, pero sin poder concretar en el arco rival. Lo tuvo a los cinco minutos con un mano a mano de Ferreyra que no pudo definir ante Barrera, y el rebote lo capturó De Seta, quien remató desde alto afuera. Midland respondió con un centro desde la izquierda, mala salida de Manuel Peralta, y Regiani, solo entrando por el segundo palo, la tiró por arriba. Sería la única aproximación peligrosa del visitante, ya que El Porvenir, con el trabajo de De Seta, y la buena actuación de Marín y Javier Peralta, no dejaba que Midland armara juego ni con Malemacci ni con Almada Flores.

El equipo de Enrique y Ventura llegaba al área rival especialmente por derecha, con las corridas permanentes de Ferreyra y la guapeza de Gustavo Fernández, peleándolas todas arriba, luchando (y ganando) con los centrales rivales. Ferreyra cabeceó desviado tras un córner, y Fernández desde afuera del área, remató alto. El Porvenir, que sufrió la salida de Del Corro por lesión en la rodilla (remplazado por Cuevas), tuvo la chance más clara sobre el final del primer tiempo. Gran jugada armada de contra por Ferreyra, pase para Fernández, que entra al área, engancha, y cuando tenía dos compañeros entrando por el medio, remata al primer palo y Barrera la saca al tiro de esquina. Fue más El Porvenir pero, una vez más, no concretaba en el arco rival.

Fue más parejo el segundo tiempo. El Porvenir avisó con un remate de Castro que se fue muy cerca del palo izquierdo, y respondió Midland con un tiro de Castagnino (el jugador más peligroso del visitante) y, tras un tiro de esquina, apareció solo Ezequiel Cérica, quien se acomodó y definió ante Peralta, que salvó de manera fantástica con una mano. Pero El Porvenir volvió a tomar las riendas del juego, con las corridas de Cuevas por izquierda (Ferreyra fue menos buscado en el segundo tiempo) y el empuje de Fernández (figura del partido), que hizo una muy buena jugada a los 33 minutos, le robó la pelota a Maidana, gambeteó a Salomón y sacó el derechazo bajo que contuvo Barrera.

Faltando cinco minutos, cuando el partido parecía encaminarse al empate, entró en acción Mauro Biasutto, de muy flojo arbitraje (todas las divididas fueron para Midland), cobrando un muy dudoso penal, por una supuesta mano de De Seta. Cérica remató al medio del arco y le dio los tres puntos a Midland.

El Porvenir intentó en los últimos minutos con el debut de Guillermo Ojeda, quien tuvo su chance sobre el final, pero su arremetida en el área fue salvada por Barrera, y cuando el rebote se metía, la pelota fue salvada sobre la línea. Llegó el final del partido, la bronca de la hinchada, los reclamos contra el árbitro, y la desazón de una nueva derrota y de no poder escapar de la zona de descenso cuando los resultados de los rivales directos habían ayudado. Se repite la historia: El Porvenir es más que el rival, no concreta, el rival aprovecha su eficacia al máximo y los arbitrajes dejan muchísimas dudas. Así, la situación se hace cada vez más complicada para el equipo de Gerli.

Ramiro Pita