A diferencia de a principios de la década del 2000, cuando los de la ribera desembarcaron en Gerli para instalar jugadores como Guillermo Baéz, Juan Manuel Aróstegui y Gabriel Amadei para conseguir dicho fin, esta vez la propuesta que el Tano pondrá sobre el escritorio de Julio Grondona será totalmente distinta.
Inspirado en casos como Real Madrid Castilla o Barcelona B, entre tantos, los xeneizes tienen intenciones de inscribir en la última divisional argentina, a un "Boca B" (por dar un nombre) que con el correr de los años pueda ir subiendo escalafones hasta instalarse en el Torneo Nacional (nombre que tomará el Nacional B a partir de 2015), lugar del que no podrá ascender por más que logre el derecho, ya que no se le permitirá toparse con su casa mayor.
Esto también significa que en un hipotético descenso del "Boca A" a segunda división, forzaría al "B" a que baje al Torneo Metropolitano (Primera B en la actualidad) aún sin merecerlo deportivamente.
Asimismo, también deberá adaptarse a las normativas que hoy rigen en la D para poder desempeñarse en ella, como es la presentación de una lista de buena fe integrada por un máximo de treinta jugadores que no posean contrato profesional, además que en cada partido haya un tope de nueve mayores de 23 años que firmen la planilla del árbitro.
Es sabido que al mandamás de la Asosiación del Fútbol Argentino no le interesa la apertura de afiliaciones desde hace varias décadas, a pesar de recibir, según dicen, más de tres mil pedidos anuales de poder integrárse a la misma, es por eso que no vería con malos ojos abrir un lugar para que se tiña de azul y oro.
Un dato no menor, es como quedará constituído el Metropolitano C (hoy Primera D) a partir de febrero próximo, ya que los tres ascensos (dos directos y otro por reducido) y la rápida vuelta del exilio de Deportivo Paraguayo, dejará un número de dieciséis entidades participantes, dos menos que los que vienen disputando el torneo hasta nuestros días.
Esto quiere decir que durante un año calendario, sin contar los compromisos por Copa Argentina, cada equipo apenas deberá afrontar treinta partidos, cuatro menos que en la temporada 2013/2014, por lo que no sería descabellado incluír al Boca B (y quién dice un River B u otro) para que la disputa tenga algo de normalidad.
La propuesta se evaluará con el correr de los próximos meses para saber si en 2015, cuando esperamos que El Porvenir haya terminado de "festejar" su salida de la D, Angelici pueda hacer realidad su deseo de expandir su club en el ascenso.
Alan Armada
@alanarmada23
